El 8 de marzo es el día de la mujer, que no se celebra sino que se conmemora. En 1857 y en 1908 hubo dos huelgas por la lucha de la igualdad de derechos de las mujeres: la primera fue de trabajadoras textiles, porque cada mujer recibía 60 o 70% menos dinero que los hombres por realizar el mismo trabajo; en la segunda 40.000 costureras industriales se alzaron, en una de las fábricas (en Nueva York) los dueños cerraron puertas y ventanas con las mujeres en huelga adentro, hubo un incendio en el edificio y fallecieron 120 mujeres atrapadas.
El día internacional de la mujer es para tomar la bandera una vez más por la igualdad en los derechos de las mujeres y los hombres, para la luchar en contra de la discriminación por el simple hecho de ser mujer.
Acá comparto algunos mensajes y datos que levantaron organizaciones de la sociedad civil:
- El 15% de todos los embarazos registrados en América Latina y el Caribe se producen en menores de 20 años
- En el mundo hay 122 mujeres de entre 25 y 34 años viviendo en condiciones de pobreza extrema por cada 100 hombres del mismo rango de edad
- 15 millones de niñas en edad escolar en el mundo nunca tendrán la oportunidad de aprender a leer o escribir en la escuela primaria. 5 millones más que los niños
- En 18 países los esposos pueden impedir que sus esposas trabajen; en 39 hijas e hijos no tienen los mismos derechos hereditarios
- Venezuela es el país de América del sur con mayor cantidad de embarazos adolescentes: 80,9 nacimientos por cada 1000 mujeres entre 15 y 19 años
- El 19% de las mujeres y niñas de entre 15 y 49 años de edad han experimentado violencia física o sexual por parte de su pareja en los últimos 12 meses
- Las mujeres ocupamos solo el 23,7 % de los escaños parlamentarios en promedio en el mundo, muy por debajo de la paridad que necesitamos para tener representación política efectiva
- En el mundo las mujeres representan solo el 28,8% de quienes se dedican a la investigación. Solo uno de cada cinco países logró la paridad de género en este ámbito
- 750 millones de mujeres y niñas en el mundo se han casado antes de cumplir 18 años y al menos 200 millones de mujeres y niñas de 30 países han sufrido mutilación genital femenina
- La brecha salarial de género a nivel mundial es del 23%. La tasa de actividad de las mujeres es del 63%, mientras que la de los hombres es del 94%
- En Venezuela “las mujeres tienen que invertir de 8 a 14 horas semanales para la adquisición de productos a precios regulados por el Estado”, tiempo improductivo para el crecimiento personal o profesional
- Las mujeres tienen 5,9% menos probabilidades que los hombres de tener un celular y su uso de Internet es más bajo: menos acceso a información y menos capacidad de elegir libremente
- Aunque ganamos menos, “las mujeres reinvierten el 90% de sus ingresos en sus familias y comunidades, mientras los hombres reinvierten sólo entre el 30% y el 40%». Lo que se traduce en menos dinero para educación, hobbies o distracción.
No hay mujer que no trabaje, así sea en casa. Ya basta de desigualdades y de injusticias, ,ya basta de «el género débil», basta de discriminación. Dicho esto, les dejo el MARAVILLOSO poema sobre el día internacional de la mujer.
Ocho de marzo, por Gioconda Belli
Amanece con pelo largo el día curvo de las mujeres,
¡Qué poco es un solo día, hermanas,
qué poco, para que el mundo acumule flores frente a nuestras casas!
De la cuna donde nacimos hasta la tumba donde dormiremos
-toda la atropellada ruta de nuestras vidas-
deberían pavimentar de flores para celebrarnos
(que no nos hagan como a la Princesa Diana que no vio, ni oyó
las floridas avenidas postradas de pena de Londres)
Nosotras queremos ver y oler las flores.
Queremos flores de los que no se alegraron cuando nacimos hembras
en vez de machos,
Queremos flores de los que nos cortaron el clítoris
Y de los que nos vendaron los pies
Queremos flores de quienes no nos mandaron al colegio para que cuidáramos a los hermanos y ayudáramos en la cocina
Flores del que se metió en la cama de noche y nos tapó la boca para violarnos mientras nuestra madre dormía
Queremos flores del que nos pagó menos por el trabajo más pesado
Y del que nos corrió cuando se dio cuenta que estábamos embarazadas
Queremos flores del que nos condenó a muerte forzándonos a parir
a riesgo de nuestras vidas
Queremos flores del que se protege del mal pensamiento
obligándonos al velo y a cubrirnos el cuerpo
Del que nos prohíbe salir a la calle sin un hombre que nos escolte
Queremos flores de los que nos quemaron por brujas
Y nos encerraron por locas
Flores del que nos pega, del que se emborracha
Del que se bebe irredento el pago de la comida del mes
Queremos flores de las que intrigan y levantan falsos
Flores de las que se ensañan contra sus hijas, sus madres y sus nueras
Y albergan ponzoña en su corazón para las de su mismo género
Tantas flores serían necesarias para secar los húmedos pantanos
donde el agua de nuestros ojos se hace lodo;
arenas movedizas tragándonos y escupiéndonos,
de las que tenaces, una a una, tendremos que surgir.
Amanece con pelo largo el día curvo de las mujeres.
Queremos flores hoy. Cuanto nos corresponde.
El jardín del que nos expulsaron.